Así se hace 

1: Sobre el contrachapado o corcho blanco que usaremos como base, colocamos bolas que antes habremos hecho con papel de periódico. Colocaremos estas bolas, unas sobre otras, levantando una pequeña montaña en forma de cono. Para que queden sujetas las pegaremos con cinta adhesiva como la que usamos en las actividades del colegio. 

2: Cuando tengamos hecha nuestra montaña de bolas de papel, colocamos en la parte más alta el vaso de plástico que va a funcionar como una chimenea volcánica y un cráter. 

3: Con el papel de aluminio cubrimos nuestra montaña, sin tapar el vaso de plástico. Si lo arrugamos un poco la sensación de relieve será mayor. 

4: Untaremos de cola blanca nuestra montaña de papel, y le echaremos por encima la arena o el mantillo. Si lo hemos hecho bien, se parecerá bastante a un volcán en miniatura. 

5: En el vaso de plástico pondremos el bicarbonato, el detergente en polvo y el pimentón rojo. A continuación verteremos el vinagre también dentro del vaso. Verás como inmediatamente se produce una reacción química que no es nada peligrosa. El cráter de nuestro volcán empezará a burbujear y de él saldrán coladas que se derramarán por las laderas. 

Unas fotos: